Los autores analizan los resultados de 236 encuestas realizadas a habitantes de la comarca del Pallars Sobirà, una zona de los Pirineos centrales donde el oso pardo ha sido reintroducido en las últimas décadas. Un regreso que se ha producido no sin cierto coste social, por las repercusiones en la cría de ovejas y la depredación de colmenas, por ejemplo, que han creado conflictos sociales y políticos entre la población local.

Comarca de Pallars Sobirà (Lleida) con presencia de oso pardo

Otra de las conclusiones es que las percepciones humanas, y probablemente también las actitudes, en relación con la reintroducción del oso pardo, dependen en parte de la proactividad de la administración local para hacer frente a los conflictos entre el hombre y el oso pardo.

La falta de información es también un problema, ya que la población local muestra un considerable desconocimiento de la población de osos pardos. Por ejemplo, casi la mitad de los entrevistados piensa que los osos son sobreabundantes y peligrosos para los humanos, incluso teniendo en cuenta que actualmente hay menos de 80 ejemplares establecidos en los Pirineos Centrales y no se ha registrado ningún ataque hasta la fecha.

Es fundamental identificar los temas conflictivos (por ejemplo, la producción de miel, la depredación del ganado, los daños en los huertos), poner en marcha campañas de comunicación y priorizar los esfuerzos para asignar adecuadamente los presupuestos de conservación y gestión.

Se puede acceder al artículo desde el siguiente enlace: Cases et al. (2024). People's perception of the brown bear reintroduction in the Spanish Pyrenees.